Cabeza a la rodilla yoga

Postura de yoga de cabeza a rodilla de pie

1. Sentado en la postura Bound Angle o Easy, extienda la pierna derecha hacia adelante, coloque la planta del pie izquierdo contra el muslo derecho. 3. Tira de la pierna derecha hacia dentro para cuadrar las caderas con la pared frontal.

4. Trabaja la postura presionando la cabeza hacia la rodilla, deslizando el talón derecho hacia fuera, alargando la pierna derecha. Mantén la cabeza presionada contra la rodilla mientras enderezas la pierna todo lo que puedas. Para un estiramiento más profundo de la pierna, presiona el talón hacia fuera y tira de los dedos del pie hacia la cabeza.

Beneficios: La postura de la cabeza a la rodilla estira la espalda y estira profundamente la parte posterior de las piernas. Esta postura calma la mente y las emociones, y estimula los sistemas nervioso, reproductor, endocrino y urinario.

Variaciones de la postura de la cabeza a la rodilla

1. Siéntate en el suelo con los pies juntos y las piernas extendidas.2. Dobla la rodilla derecha y acerca la planta del pie derecho al muslo izquierdo.3. Exhala mientras doblas las caderas, baja lentamente el torso y agarra el pie izquierdo.4. Mantén la postura de 30 segundos a 1 minuto y luego cambia de lado.

Mantenga la columna larga, baje y alargue el torso hasta que el pecho y el vientre toquen el muslo, y sienta el estiramiento en la parte posterior de la pierna extendida. Profundiza el estiramiento al exhalar y, al inhalar, alarga la columna vertebral.

La postura de flexión hacia delante de la cabeza a la rodilla estira los isquiotibiales, alarga la columna vertebral, fortalece los músculos de la espalda y masajea los órganos abdominales. Esta postura calma el sistema nervioso central, reduce el estrés y alivia la ansiedad y la depresión leve.

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Beneficios del yoga de la rodilla a la nariz

Janu Sirsasana (postura de la cabeza a la rodilla) es un pliegue completo hacia delante que ofrece un estiramiento desde el tobillo hasta las caderas, a lo largo de toda la espalda y también a lo largo del costado del cuerpo.    Puede ayudar a calmar la mente y a estirar el cuerpo. Mientras te doblas hacia delante, cierra los ojos y cultiva una sensación de paz interior.

Alarga la columna vertebral y dóblate desde el pliegue de la cadera, en lugar de redondear la espalda. Extiende la cabeza y el corazón hacia delante, pero no te excedas. Las ilusiones de grandeza pueden apoderarse de ti cuando el deseo de llegar lo más lejos posible en una asana, o postura, te lleva más allá de tus límites. Esto es tanto asmita, o ego, como incapacidad o mansedumbre. Para mantener tu ego en línea con la realidad, aborda cualquier postura con humildad y concentración. Mantente presente, sin tratar de moverte demasiado rápido. Intenta experimentar lo que sientes en tu cuerpo sin dejarte envolver por la consecución de un objetivo.

Por qué nos gusta: Esta postura es la prueba para mí de que hay honor en el intento. Definitivamente no puedo colocar mi cabeza sobre mi rodilla mientras me doblo hacia adelante -ni siquiera cerca- pero aún así puedo entrar en la postura. ¿Cómo? Porque esta postura me hace volver a mi respiración, yendo sólo tan profundo como mi cuerpo lo permita. Esta lección se traslada a todas las posturas que intento. No hace falta tener la forma perfecta para practicar yoga, sólo hay que estar dispuesto a encontrar tu límite. – Kyle Houseworth, editor adjunto

Postura de la cabeza a la rodilla en sánscrito

La postura de la cabeza a la rodilla suele practicarse al final de una secuencia de yoga, cuando el cuerpo ya está caliente. Aunque esta postura es una flexión profunda hacia delante, no dejes que su nombre te engañe. Tocar la cabeza con la rodilla no es el aspecto más importante. En su lugar, concéntrese en la longitud de la columna vertebral, lo que le permitirá estirar profundamente la espalda y los isquiotibiales.

Los beneficios de la postura de la cabeza a la rodilla son enormes. Además de estirar los isquiotibiales, la ingle y la columna vertebral, este leve giro de la columna vertebral también calma la mente. La postura de la cabeza a la rodilla es conocida por aliviar la ansiedad, la fatiga y la depresión leve. Incluso puede ayudar con los problemas digestivos, ya que estimula y masajea el hígado y los riñones.

Si necesitas una modificación para la Janu Sirsasana, intenta colocar un bloque de yoga debajo de la pierna que baja. Como siempre, escucha a tu cuerpo y acude a tu médico si tienes alguna duda o experimentas un dolor negativo.